Yo desde aquí, me gustaría concienciar a todos aquellos que cojeéis el coche o la moto,, tener mucho cuidado, y que tengáis los cinco sentidos puestos al volante, por que no solo sufrir vosotros, con el accidente, también sufren vuestra familia, hermanos.
Por favor tener mucho cuidado a la hora de coger el coche o la moto, mas vale llegar cinco minutos tarde que no llegar.
Todo empezó cuando el día 3 de agosto 2002. Cuando la policía llego a casa sobre la una de la madrugada, para avisarnos que nuestro hijo había tenido un accidente con la moto.
Entones todo me cambio de golpe mi alma se quebró en ese mismo instante.
Cuando llegue al hospital para ver a mi hijo y me dijeron que estaba en coma profundo, algo le paso a mi cuerpo, algo raro, ahogo un vacío, desesperación, miedo, horror, terror.
Después lo trasladarían a un hospital en Barcelona. Los médicos nos informaron que su vida corría peligro, que era critica, y yo no podía dar crédito a lo que estaba escuchando, no podía estar oyendo lo que oían mis oídos……. Esto no podía estar sucediéndome a mi…. Era como si a mi no me estuviera pasando..
Después lo trasladaron a la UCI… yo al ver a mi hijo a sin lleno de tubos y maquinas, en ese estado… pensé morirme en ese mismo instante… mi alma cayo al suelo…me sentí invadida de una extraña sensación…
Los médicos nos informaron que debía permanecer en observación durante 72 h, para ver la evolución que mi hijo hacia, ya que su vida corría verdadero peligro.
Fueron las 72 h. mas largas de toda mi vida. Las enfermeras me decían que le hablara, a lo cual yo contestaba, ¿para que? Si mi hijo no me escuchaba, pero ellas insistían diciéndome que le oído es el ultimo órgano que se pierde. Así lo hice…. Le hablaba en todo momento…. Cuando estaba con el….
Aprendí a hablar con mi hijo, con ánimo positivo…. Que ria que mi hijo sintiera o percibiera, si es que percibía mis palabras.
continuara.......